La suegra mártir se pasa el fin de semana tomando cafés con las hermanas y viendo los últimos estrenos de cartelera, pero cuando vais a verla de visita, os recibe con cara de pena y se cruza la bata como si la acabaran de sacar de una patera para explicaros lo mal que se encuentra, que le duelen hasta las cejas desde sólo dios sabe cuándo, sólo que ella no se queja ‘porque ya sabéis que a mí, a prudente no me gana nadie’.
La suegra mártir se queja de que nunca le llevas los niños a
casa ‘con las ganas que tiene una de ver a sus nietos, que es lo único que me
anima que me paso el día aquí metida y me voy a volver loca’ aunque se los
lleves dos veces por semana y cuando llegues la pilles peinada de peluquería y
con las uñas de gel puestas, ‘que ya ves, no sé ni cómo me las han podido
poner, con el brote que tengo de soriasis que no levanto cabeza’.
La suegra mártir dice que no puede ir al cumpleaños de tu
hijo porque la pilla de crucero pero luego se pasa dos meses echándote en cara,
suave como un guante, que no ha podido ver a su nieto soplar las velas ‘que ya
ves tú, hoy en día uno celebra el cumpleaños cuando quiere y con sólo tres días
más, le hubiera podido ver, pero claro…’.
La suegra mártir hace lo que le da la gana, pero para que no
puedas poner mala cara, pone cara de perro apaleado con retortijones. Así si te
compra 18 pares de leggins aunque los odies más que las espinacas y ella lo
sepa porque lo habéis hablados dos millones de veces, te dice ‘ay, sólo espero
que te gusten porque me ha costado la vida encontrarlos, vamos, que
destrozadita llegué a casa buscándolos en color verde manzana, que es el que te
gusta, ¿no?’.
La suegra mártir siempre que viene a tu casa llega precedida
de una serie de catastróficas desdichas, que si los taxis no la paraban ‘que
claro que como una está vieja’, que si tu suegro no ha querido traerla ‘él nada
más que quiere dominó y fútbol, con lo que yo hago por él’ y en el autobús
nadie la dejaba sentarse ‘con el dolor de pies que traía, que tengo el juanete
para haberme quedado en casa’.
La suegra mártir se ofrece a quedarse con tus hijos pero
cuando los recoges siempre te cuenta, despacito y con buena cara para parecer más
buena gente, que ha sido muy feliz con los nietos, con lo que ella los quiere,
pero que vamos que ni dormir ha dormido porque los niños querían dormir cada
uno en una cama y al final ella se fue al sofá ‘para que durmieran tranquilitos,
aunque ya sabes como tengo la espalda, pero bueno’ y bueno, ni tiempo para
comer ‘que mira que el médico me ha dicho que no me salte comidas, pero no me
importa’ ‘y la novela a ver si me la veo en Internet porque la niña quería ver
Peppa Pig y claro a mí no me importa aunque ya ves tú, justo hoy era el día en
que se declaraba Norberto y mira que tenía ganas de verlo, pero vamos, que yo
encantada’…
A partir de ahora, cada lunes, un nuevo modelo de suegra en ‘Suegra sí hay más que una’. Es hora de sacar la lengua viperina que Dios nos ha dado, criticar, desahogaros y puntuar a la vuestra con nuestra típica puntuación del 1 al 10… Yo me abstengo, que para eso mi suegra es un primor –y me lee- jajjaja, pero vosotros podéis dejaros la bilis… No sé por qué me da que va a haber muchos comentarios anónimos… A criticar!!! Y que no se ofenda nadie, que esto es para divertirnos!!
A partir de ahora, cada lunes, un nuevo modelo de suegra en ‘Suegra sí hay más que una’. Es hora de sacar la lengua viperina que Dios nos ha dado, criticar, desahogaros y puntuar a la vuestra con nuestra típica puntuación del 1 al 10… Yo me abstengo, que para eso mi suegra es un primor –y me lee- jajjaja, pero vosotros podéis dejaros la bilis… No sé por qué me da que va a haber muchos comentarios anónimos… A criticar!!! Y que no se ofenda nadie, que esto es para divertirnos!!